Caballito de mar pigmeo (Hippocampus bargibanti)
El caballito de mar pigmeo es sin duda una de las especies mejor camufladas de los océanos, siendo extremadamente difícil de encontrar entre los corales gorgonios (foto) en los que habita. Tan efectivo es este camuflaje que la especie no fue descubierta hasta que el coral fue examinado en un laboratorio.
Los tubérculos grandes y bulbosos cubren el cuerpo de esta especie y combinan con el color y la forma de los pólipos de su especie huésped de coral gorgoniano, mientras que su cuerpo coincide con el tallo gorgoniano.
Existen dos formas de color: hay individuos de color gris pálido o púrpura diseminados con tubérculos rosados o rojos que se encuentran en el coral gorgoniano de color similar Muricella plectana, y los individuos amarillos con tubérculos anaranjados se encuentran en el coral gorgonia Muricella paraplectana.
No se sabe si los hipocampos pueden cambiar de color o si cambian los huéspedes, aunque la capacidad de cambiar el color de acuerdo con su entorno sí existe en otras especies de caballitos de mar, como H. whitei .
Esta es también una de las especies más pequeñas de caballitos de mar en el mundo, por lo general mide menos de 2 centímetros.
Inusualmente, es el macho y no la hembra, el que queda embarazada en los caballitos de mar.
En este blog se intenta describir la flora y fauna exclusiva de ciertas regiones del planeta (no se encuentran en otros lugares), puede ser un país o, para cierto tipo de hábitat o área geográfica característica. Sólo se excluyen las especies endémicas de las pequeñas y numerosas islas que abarcan los océanos. Haciendo click en el nombre científico se accede a los datos de las especies. Además se despliega una lista de la fauna extinta por país, que no necesariamente es endémica.
Historia del enemismo
La historia completa de la tierra puede ser comparable a la duración de 1 año de vida. En esta escala de tiempo, la evolución produjo la primera alga en agosto, el primer invertebrado marino en la segunda semana de noviembre, los peces una semana después, y la primera lagartija en la mitad de diciembre. El hombre no apareció hasta tarde en el atardecer del 31 de diciembre, el último día. El hombre industrializado hace sólo dos segundos.
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